lunes, 11 de abril de 2011

¿Por qué?




Tenía frío. Todo el vello de su cuerpo se erizaba con aquel horrible hormigueo que la recorría desde la nuca, casi se sentía arder. Levantó la vista de sus manos y encontró sus ojos tristes, otra vez aquella impotencia encerrada en dos pupilas ¿Por qué? ¿Por qué no podía entenderla?

Incapaz de soportarlo declinó de nuevo sus ojos vidriosos, bajó los pies de la cama y sin siquiera volver la vista atrás cerró la puerta tras de si. Él no iría a buscarla… Él solo trataría de comprender amargamente que había hecho mal esta vez… Él no podía comprenderla… Sintió la fresca aspereza del yeso en su espalda desnuda, era agradable en contraste a sus mejillas febriles, pronto dejó de serlo. Aquel instante en la oscuridad penetrante, aquella pared fría, sus pechos en llamas bajo la escasa tela, aquel vacío en el corazón... Y estaba sola, sola en esa casa llena de gente, sola junto aquel que creía amarla, sola…


Aquel instante se sintió morir…


Llevándose las manos a la cara intentó sofocar el llanto que la quemaba, sus ojos eran dos tizones ardientes, nada había que hacer ya. Sin poder luchar más contra aquella amargura que le vaciaba el corazón decidió arrancárselo ella misma perdiéndose en el dolor. Sus manos se hundían desesperadamente en su pelo como garras, como un depredador luchando con su mismo ser y alma, como un pobre animal tratando de escapar de si mismo.

Tambaleante llegó a su cama. Dejó caer su cuerpo inerte sobre las sabanas y sus lagrimas rodar sobre la almohada marchita, tarde o temprano la consciencia la abandonaría, deseó que eso pasara pronto. Los dientes apretados y los dedos crispados, cada lagrima más afilada que la anterior, cada sollozo más punzante, cada sonido en la noche un sobresalto y cada sobresalto un abandono más profundo de su propio ser. Su cuerpo rodando entre las sabanas intentando arrancarse el corazón y con cada arrebato más se hundía en sus propios sueños…


Una ultima lágrima quemando la piel… Un ultimo surco en el alma…


¿Por qué? ¿Por qué no podía entenderla?


Y todo se volvió en nada.